Hoy empieza el día con niebla y no apetece mucho montar en bicicleta, esa es la verdad. Pero la idea de inspeccionar el embalse de
Irueña no es del todo mala, teniendo en cuenta, que esa zona es mas elevada, el día estará mas despejado.
El camino elegido es la cañada real de
Extremadura en dirección a
Fuenteguinaldo. Antes de llegar a este pueblo se toma el camino de un monte publico que conduce a un cruce de caminos, allí se toma el de la izquierda, y sin mas problemas se llega al vaso del embalse.
Recorriendo por los caminos del vaso, se puede ver la magnitud de la avenida de agua que hubiera inundado una vez mas Ciudad Rodrigo. De no ser por esta obra, también habrían celebrado el centenario los mirobrigenses, me refiero a una crecida que en el año 1909 dejo el arrabal de puente cubierto de agua.
Como la obra aun está por terminar pudimos hacer esta particular inspección que la hemos dividido en tres partes.
1º Prueba de carga con (nuestros medios).
2ºRevisión ocular de posibles fallos en elementos estructurales.
3ºTrazado de curvas y peraltes.
Para lo que nosotros lo queremos está estupendo. Tenemos garantizado el suministro de agua para los próximo veranos. Por fin parece que da sus frutos la presa, ya que entre sequías en verano e inundaciones en invierno, unas cuantas de calamidades hemos pasado por la comarca de Ciudad Rodrigo.
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